"En todas las edades de mi vida, el exceso de dolor ha sido monstruoso" dice lapidariamente Nietsche. Al ser consciente de su propia enfermedad se asombra de encontrarse vivo y de ver que, en las épocas más dolorosas de su existencia, no ha hecho más que aumentar su productividad. Proclama aún esas orgullosas palabras: "Conozco mejor la vida porque muy a menudo he estado en trance de perderla".
Inmerso en este pandemónium gripal vislumbro la verdad que se esconde tras las palabras del filósofo: el carácter inmanente de la creación en la enfermedad, en el sufrimiento, pues estos nos obligan a descender a lo más profundo de nuestro ser, a abrazar la vida con más fuerza si cabe.
A la par que nuestro espíritu se libera, gozamos de un relativismo más objetivo después de haber padecido los sinsabores del decaimiento. El ostracismo al que somos condenados nos regala un tiempo precioso para la meditación. En palabras de Cioran: "Los desastres demasiado recientes poseen el inconveniente de impedirnos discernir su lado positvo".
Inmerso en este pandemónium gripal vislumbro la verdad que se esconde tras las palabras del filósofo: el carácter inmanente de la creación en la enfermedad, en el sufrimiento, pues estos nos obligan a descender a lo más profundo de nuestro ser, a abrazar la vida con más fuerza si cabe.
A la par que nuestro espíritu se libera, gozamos de un relativismo más objetivo después de haber padecido los sinsabores del decaimiento. El ostracismo al que somos condenados nos regala un tiempo precioso para la meditación. En palabras de Cioran: "Los desastres demasiado recientes poseen el inconveniente de impedirnos discernir su lado positvo".
8 comments:
Nunca le he sacado tanto partido a mis enfermedades respiratorias.
Discrepo: la creación se potencia cuando uno mira en su interior, y eso ocurre cuando tenemos un gripazo, y el mundo nos es ajeno, y sólo pensamos en nuestros mocos, pero tambíen cuando experimentamos una realidad nueva, que nos impacta y nos deleita, un paisaje, una buena pierna..."aunque sea de cordero", una buena lectura.... En fin, multiples son los ejemplos, Y claro es mejor crear, cuando no nos duele la cabeza,.,
En todo caso, la idea es interesante, muy interesante. Gozemos de la vida, como si fuese un buen gripazo.... Conscientes, siempre conscientes...
Felicitaciones por su blog...
Huy la gripe... que malita que es.
Cuídese buen hombre.
No sabe hasta que punto estoy de acuerdo en lo que comenta. Aproveche su convalecencia :)
Mmmm... ya decía yo que últimamente te veía cara moco... jejeje ;)
Solo quería decirle que si va a seguir publicando así, no es necesario que se mejore usted... por lo menos en una temporadilla. Espero verle por mi reciente blog, a ver si me contagia la gripe creativa!
En el terreno espiritual-animoso, no puedo estar más de acuerdo. En el plano físico, no sé usted, pero un servidor, con un estado gripal medio, no sirve ni para pensar si quiera.
Mejórate Loco, cuídate.
Y en cuanto a lo de la creacción, yo creo que la absenta ha hecho más por ella que la gripe.
Un beso, Miriam G.
Yo a esa, como al hombre del saco, le perdí el miedo hace mucho.
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