Tuesday, 18 September 2007

TIME

Cuando se es joven uno piensa que vivirá eternamente y, aún así, acumula frenéticamente experiencias mientras va quemando etapas, quizá dando una validez vital a la Teoría Especial de la Relatividad: a velocidades cercanas a la de la luz el tiempo transcurre más despacio. Paradójicamente, sobreviene la sensación del envejecimiento prematuro, de estar de vuelta de todo demasiado temprano.
Decía Kundera, en su obra "La lentitud", que la velocidad es directamente proporcional a la intensidad del olvido; uno de los sintomas del alzheimer, enfermedad que se manifiesta en etapas avanzadas de la vida, es la amnesia progresiva. Correr entonces detrás de quimeras para disfrutar lo antes posible de una senilidad asegurada?
Para explicar la reconfiguración del nuevo orden mundial, uno de los grandes analistas de nuestro tiempo, Huntington, nos habla del choque de las civilizaciones: "en este nuevo mundo, los conflictos más generalizados, importantes y peligrosos no serán los que se produzcan entre clases sociales, ricos y pobres u otros grupos definidos por criterios económicos, sino aquellos que afecten a pueblos pertenecientes a diferentes entidades culturales". Históricamente los elementos diferenciadores clave entre civilizaciones han sido: sangre, lengua, religión y forma de vida. En el caso de tres de las grandes civilizaciones actuales: china, japonesa e islámica, se debería añadir un rasgo diferenciador crucial, su concepto del tiempo. No es necesario conocer a fondo la cultura china o japonesa, ni siquiera la islámica para darse cuenta de que su percepción temporal choca con la "occidental". Todos tenemos la imagen del árabe sentado a la puerta de su haima esperando ver pasar a su enemigo muerto. Podemos intentar ver, si no, "El viento nos llevará" de Abbas Kiarostami. Tal vez prefiramos devanarnos los sesos intentando averiguar aquello que se nos escapa cuando leemos a Kawabata o por qué nos tentaba el sueño viendo Mishima de Schrader; seguro que no era por la música hipnótica de Philip Glass. Se me ocurren más ejemplos fílmicos: "El perro mongol" de Byambasuren Davaa, "Dolls" de Takeshi Kitano y "El camino a casa" de Zhang Yimou. Dejando a un lado la trama de todas estas películas y de buena parte de la obra de Mishima y de Kawabata, lo que tienen en común es su particular tratamiento del paso del tiempo que a nosotros, los "occidentales", nos produce cierta aprensión, cierta axfisia, cierta incomprensión.
Sin embargo, podemos encontrar algunas joyas más cercanas que tratan el tema que nos ocupa, como la canción Time, de Pink Floyd. Con ella les dejo.

TIME

Ticking away the moments that make up a dull day
You fritter and waste the hours in an off hand way
Kicking around on a piece of ground in your home town
Waiting for someone or something to show you the way
Tired of lying in the sunshine staying home to watch the rain
You are young and life is long and there is time to kill today
And then one day you find ten years have got behind you
No one told you when to run, you missed the starting gun
And you run and you run to catch up with the sun, but its sinking
And racing around to come up behind you again
The sun is the same in the relative way, but youre older
Shorter of breath and one day closer to death
Every year is getting shorter, never seem to find the time
Plans that either come to naught or half a page of scribbled lines
Hanging on in quiet desperation is the english way
The time is gone, the song is over, thought Id something more to say
Home, home again
I like to be here when I can
And when I come home cold and tired
Its good to warm my bones beside the fire
Far away across the field
The tolling of the iron bell
Calls the faithful to their knees
To hear the softly spoken magic spells.



16 comments:

Estrellita Mutante said...

Una sensación entre angustia y felicidad se ha apoderado de mi leyendo su post. La conclusión es que seguiré dejando pasar el tiempo sin que en mi vida pase nada y me conformaré con esa copa de vino y la charla tras salir del trabajo.

Si me lo permite, estoy en desacuerdo con que Huntington sea uno de los grandes analistas politico-sociales. Su teoría del choque de civilizaciones me parece pura demagogia filosófica. Personalmente, creo que expresa nuestro tiempo en una dualidad violenta entre oriente y occidente que no existe como tal, es reduccionista.

el loco oficial said...

No sólo se lo permito sino que le agradezco su discrepancia, de ahí salen conversaciones interesantes. Seguramente piense de diferente forma cuando termine de leer a Huntington. Lo utilicé en parte como ve para introducir mi "tesis" sobre la diferencia entre ciertas culturas en lo que a percepción temporal se refiere. Aún así, el autor, al principio del libro, justifica su postura, entre reduccionista en parte y pragmática por otro. En realidad el plantea el orden mundia como "lucha" entre, al menos, ocho grandes civilizaciones y rechaza de plano los vácuos conceptos de "oriente" y "occidente". Gracias Estrellita por sus apreciaciones :)

el loco oficial said...

y por cierto sabia manera de vivir: charla reconfortante después del trabajo y copa de vino :D

Estrellita Mutante said...

Solo me convence en parte, aunque me relevante el uso de la referencia. Comprendo en cierta medida que mi reticencia hacia las teorías de Huntington vienen en gran medida por mi aversión hacia Fukuyama. También yo he sido reduccionista y demagoga en mi opinión (es mi sino).

Lo de la copa de vino se lo recomiendo, aunque sea con sus propios pensamientos.

Higronauta said...

Leyendo esto me ha venido a la cabeza aquél proverbio árabe: «Vosotros, los europeos, tenéis los relojes, pero nosotros tenemos el tiempo».

el loco oficial said...

Estrellita: el único alcohol que me permito ingerir es algo de buen vino muy de vez en cuando jeje

D. Higro, me ha gustado tanto ese proverbio que directamente ocupará un lugar en mi zona de "citas".

Miriam G. said...

Yo cada vez que alguien me recuerda que envejezco me muero porque no me quiero morir.

Un beso, Miriam G.

Aura said...

Despacio Aura, despacio...

Angel said...

El tiempo....., que cosas, ese mostruo de mil cabezas. Creo que ni Bergson que dedico parte de su vida a ello, logró entenderlo muy bien.
Como físico, podría considerarlo como una variable independiente, pero ese es el gran problema, el observador, el que mide no es independiente, su propia carne, su devenir esta constituido de moléculas de tiempo. Como ser objetivo, como salirse fuera de lo que es la propia esencia.
En realidad la teoría de la relatividad no dice que el tiempo pase más lento a alta velocidad o que las escalas sean menores. Se refiere a la medida de estas variables por un observador en movimiento relativo. Para otro en reposo tienen la misma longitud. Ello nos lleva a algo de sumo interes. No sabemos lo que las cosas son, y a veces ni siquiera podemos medirlas bien. Pero es que además, acaso el tiempo existe fuera de nosotros como observadores, que modelamos su devenir...
Genial, los aportes culturales referenes a las culturas chinas y arabes. Quizas el objetivo de esas filosofías es considerar que aquello que no es posible asimilar mejor es que no nos interrogue ni nos angustie.
A mi personalmene me gustan los relojes de Dali, que se licuan y desvanecen sobre la realidad del fondo.
El tema del tiempo, podría ser objeto de mil y una historias. Te animo a seguir. Me gustan, nos gustan tus post...

Pussy Galore said...

pues yo no quiero la inmortalidad. ya tengo bastantes problemas.

el loco oficial said...

la inmortalidad debe de ser aburrida, sabiendo que la vas a palmar: 1 - relativizas (o equivalentemente nada es lo suficientemente importante como para cosntituir un problema), 2 - vives con más intensidad...
a mi mientras me digan que una vez en el hoyo voy a poder seguir escuchando música...

Miriam G. said...

Yo s� quiero ser inmortal.

Un beso, Miriam G.

el loco oficial said...

A veces me da por contarme a mí mismo lo de Aquiles y la tortuga de la siguiente manera: la esperanza de vida supongamos que es ahora 80, cuando llegue a los 80 la esperanza de vida se habrá incrementado por ejemplo hasta los 82, cuando llegue a los 82...y nunca la alcanzo...les convence?

Miriam G. said...

Yo no me he animado mucho, porque alcanzarla la alcanzó ¿no?

Tardasteis dos mil años los matemáticos en saber sumar series convergentes, pero finalmente la paradoja de Zenon quedo aclarada... Aquiles pilla a la tortuga.

Un beso, Miriam G.

el loco oficial said...

Está usted muy puesta por lo que veo ;). Un beso.

Miriam G. said...

Me gustan las matemáticas, mucho. Mis mejores notas siempre han sido en matemáticas, en la carrera también.

Un día de estos, cuando Candela sea adolescente me matricularé en exactas para buscarle remedio a mis penas...

Un beso, Miriam G.