Wednesday 11 July 2007

REVERBERACIÓN MATEMÁTICA


No hace mucho se celebró el Primavera Blues Festival. El cartel no estaba mal: para ir abriendo boca el jueves tocaba Dr. Feelgood. Un grupazo al que sin embargo no fui a ver...es lo que tiene trabajar el viernes y tener que conducir temprano por la mañana. Me sorprendió saber que tan añeja banda de rythm and blues (llevan en activo desde el 71) tocaba en el culo del mundo; por lo visto se salieron. Canciones "simples" tocadas con mucha garra. Al día siguiente tocó Stevie Zee con Ñaco Goñi. A éste último tuve la suerte de verlo en una jam session en Madrid no hace mucho. Un gran armonicista que, sin embargo, tuvo sus más y sus menos con Stevie en este concierto. El pobre Zee se sentía incomprendido cuando Ñaco le increpaba para que bajara el volumen de su ampli. Algunos "guitarristas" cuando se gasean son realmente peligrosos: a partir de media noche probablemente terminarán convertidos en gremlins armados con la palanca de trémolo y dispuestos a utilizar el pedal de wah como arma arrojadiza si su ego no se ve suficientemente saciado por tocar dos decibelios más bajo.
Tras todos estos preámbulos llegó el sábado. Ahí me tienen, sin planes aparentes, jamando una pizza, con los bigotes ardiendo y el queso fundido chorreando barbas abajo, barajando todas las posibilidades antes de poner un pie en la calle. No había demasiadas ganas. El destello del móvil me pilló atrapando el último champiñón rebelde: "RED HOUSE tocan a las 11". Mejor olvidemos a los teloneros.
El guitarrista de esta banda no es otro sino Paco Simón. El nombre, así, sin anestesia, puede sonar a chufla. Peor aún si uno lo asocia con Caiga quien caiga. Pero allí lo que hacía era "enreá" como dicen por aquí. Principio del concierto: unas 50 personas. De repente sale Paquito con una "Paula" y un slide. Un riff de poco más de tres notas que bastó para que se pasaran la semana entera alicatando de nuevo media manzana. No hay mucho más que contar si saben el tipo de tono que tienen esas guitarras. Sin darle mayor trascendencia cambió un poco su setup. Creo que fue entonces cuando empecé a tener los pelos como escarpias: Una Tyler modelo Dann Huff!!. He tenido la suerte de ver unos cuantos buenos conciertos y a unos cuantos "grandes" en directo y pensé que había perdido toda capacidad de maravillarme...nada más lejos de la realidad. No fue un concierto de blues al uso. Tocó todos los palos dentro del género. Técnica impecable, lleno de recursos, un groove acojonante, un sonidazo...y un gran sentido del humor; qué hay más sureño que el "lick blusero de la gallina" y el del "Mack rodando ruta 66 abajo".
Todo demasiado bueno para ser verdad, teniendo en cuenta las horas que eran (cerca de las 3 a.m.), y la ciudad en la que nos encontrábamos. Efectivamente, como era de esperar, empezó a llegar la chusma. Primero fueron las hordas de maduritos que competían con sus cacareos con el bombo de la batería pero aún faltaba el plato fuerte de la noche. Cuál no sería mi sorpresa al ver aparecer una de las Plagas de Egipto que no se cita en los libros sagrados: los matemáticos!, y todos en tropel. Empecé a cuestionarme la física de ondas y hasta la ciencia de los materiales; el tono de la guitarra cayó estrepitosamente y los bajos empezaron a acoplarse. Por un momento pensamos que a Paco se le había ido la olla con el potenciometro de la "reverb". Inaudito!. Qué manera de joderse un concierto!. Había escuchado que los matemáticos son entes extraños que se codean, a veces, con los filósofos. Pero no sabía que poseían tales propiedades acústicas. Quizá los terminen utilizando como alternativa al poliestireno expandido para aislamientos. He esperado a recuperarme del shock para poder escribir el post. Quería dejar constancia de un fenómeno que lamentablemente ocurre a menudo en esta ciudad. La falta de todo, especialmente de cultura, hace que pululen individuos (las mayorías fascistas) que quieren imponer a toda costa la cultura cani, no respetando a otra gente que simplemente quiere escuchar un buen concierto o ir al cineclub a ver una peli.

1 comment:

Anonymous said...

Discrepo un poco del fondo del comentario, concretamente de expresiones como:"La falta de todo, especialmente de cultura, hace que pululen individuos (las mayorías fascistas) que quieren imponer a toda costa la cultura cani, no respetando a otra gente...". Todo grupo, tiene cierta tendencia al proxelitismo y desprecio de lo ajeno. Por otro parte los matemáticos como grupo social no existen, por su misma constitución (seres egocentricos e individualistas...) no forman grupo, o en todo caso el cardinal siempre es uno.
Pero.... el tono irónico del artículo, esta bien conseguido. Supongo que estaría bien un cierto distanciamiento y que se note menos el cabreo personal.

Saludos